Venezuela potencia mundial en conservación del ambiente

Caracas, 27.04.09 (Prensa Minamb).- "Para el Gobierno Bolivariano, la conservación de la Diversidad Biológica es un asunto de Estado, teniendo como marco estratégico que el conocimiento, la conservación y el manejo de la diversidad biológica se entienden como vías para consolidar una sociedad más justa y equitativa para las generaciones presentes y futuras”.

Así lo aseveró Jesús Manzanilla, director general de la Oficina Nacional de Diversidad Biológica del Ministerio del Poder Popular para el Ambiente (Minamb), quien destacó que el Gobierno Revolucionario ha superado con creces las políticas del pasado, estableciendo líneas estratégicas claras que nos reivindican como verdaderos gestores de la naturaleza.

“Por tal razón, rompiendo los paradigmas, se han definido 7 líneas estratégicas, que abordan la extinción de las especies, la conservación del hábitat, la amenaza de las especies invasoras y los organismos genéticamente modificados, el aprovechamiento sustentable de las especies, el tráfico ilegal de especies y el manejo de la información como temas relevantes, todas ellas conceptualizadas dentro del Plan Nacional Simón Bolívar para el desarrollo económico y social de la Nación”, explicó.

Destacó Manzanilla que la acción conservacionista más reciente y contundente, con connotaciones internacionales, ha sido la prohibición de la Pesca de Arrastre, un arte de pesca depredador considerado por la FAO como una amenaza a la Diversidad Biológica y a la seguridad alimentaria, acción con la que se reivindica el verdadero valor de la Diversidad Biológica, considerándola un elemento fundamental para el desarrollo, el bienestar social, la soberanía y la independencia.

Agregó que a esta importante acción se le suma el reciente reconocimiento obtenido por parte de la UNESCO, quien ha otorgado el aval a la Reserva de Biosfera Delta del Orinoco para su inclusión en la Red Mundial de Reservas de Biosfera.

“Esta adhesión a la Red Mundial de Reservas de Biosfera se fundamenta en la acertada gestión de esta área protegida en el marco del desarrollo sustentable, que garantiza la conservación, en concordancia con el desarrollo social y económico de nuestros pueblos”. En este mismo orden de ideas, el director general de la Oficina Nacional de Diversidad Biológica del Minamb, apuntó que el estado venezolano reconoce el verdadero valor de la participación comunitaria en la gestión de los recursos biológicos, como única garantía de su conservación.

“En ese sentido se da un adecuado significado a la ya agotada definición de “participación local”, la cual fue edificada al servicio de los lineamientos e intereses de las corporaciones transnacionales de la conservación, que por décadas vulneraron la soberanía de los pueblos y desvirtuaron los nobles objetivos de los procesos sociales en América Latina”, dijo Manzanilla, tras recalcar que bajo las premisas contempladas en la Constitución Bolivariana, “entendemos la cooperación bajo el principio sagrado de la autodeterminación de los pueblos".

“Mediante el diseño de nuevas formas de organización, con soporte en nuestra Carta Magna, tales como las Mesas Técnicas de Agua, los Comités Conservacionistas, entre otros, el proceso bolivariano ha demostrado que en materia ambiental somos un país libre y soberano, capaz de gerenciar nuestros recursos, nuestros procesos y que para ello no dependemos de las trasnacionales. Asistimos a la edificación de una potencia mundial en Conservación del Medio Ambiente y referencia regional en el ejercicio soberano de la gestión ambiental”, concluyó. (FIN/Glenda Mirabal)